De forma frecuente el ser humano pone en peligro a diferentes especies, siendo este caso el oso la especie amenazada por la acción del hombre. Desde diferentes países asiáticos se está observando un aumento de la caza furtiva del oso, lo que pone en peligro su especie en Asia y que sin duda está haciendo que se deban tomar medidas de urgencia. La finalidad de la caza del oso es curiosamente para vender su bilis, un líquido que es realmente muy apreciado por la cultura china para diferentes remedios naturales.
Lo más curioso de este negocio ilegal es que la venta de bilis no se puede hacer de un país a otro, sino que se tiene que dar en los países que tienen la venta legalizada, que en este caso son China y Japón. Lo que se suele hacer en estos casos es que los cazadores venden la bilis a estos dos países en los que legalmente se puede comercial, haciendo peligrar la población de osos por únicamente conseguir su bilis para ganar mucho dinero gracias a ella.
Lógicamente las personas que se dedican a investigar todo este tráfico de sustancias procedentes de animales, están intentando dar una solución a todo lo que está sucediendo en diferentes países de Asia, un problema importante si tenemos en cuenta que el descenso de la población de osos de Asia está descendiendo de forma notable en estos últimos años y los cazadores tienen buena culpa de que esto está sucediendo desde hace algunos años.