En Malasia hay leyes que son ciertamente peculiares y llamativas. Desde Malasia se aconseja que se incorpore el castigo físico en las escuelas para las niñas, ya que hasta ahora, tan sólo se puede pegar a los niños que hagan algo que no deban, mientras que a las niñas de Malasia se las puede castigar limpiando los retretes. Ahora quieren igualar los castigos entre niños y niñas, por lo que a partir de ahora, las niñas podrán recibir también azotes en las escuelas, algo de otra época ya por fortuna superada en muchas partes del mundo.

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Malasia tiene un pensamiento diferente al que se puede tener en Europa y más teniendo en cuenta que el islam tiene estas cosas. Tanto los pedagogos como las asociaciones de profesores, están de acuerdo con pegar también a las niñas cuando hagan algo que no deban. Este castigo es ciertamente desproporcionado y no tiene ninguna justificación, se trate del islam o de otra religión. Esta serie de castigos físicos a niños y a las niñas son medidas desproporcionadas y sin sentido.

Toda religión tiene aspectos negativos y en el caso del Islam son muchos también. Uno de ellos es hacer creer que las personas que siguen esta religión son basura en comparación con Alá, algo muy discutible y mucho más sabiendo que Alá es un Dios. Estas y otras creencias son las que se deberían cambiar para que en Malasia no se castigara de manera física, como lo hacían con los niños y ahora lo harán con las niñas.

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